Así fue la difusión presencial del programa Experiencia Ambientalia, donde recorrimos 1848 km para llevar la educación ambiental a lo largo y ancho de la región de Ansenuza.
Marina Castellino, de Miramar de Ansenuza, y Marilena Servin, de Brinkmann, quienes se autodenominan como ‘las Maris’, se embarcaron juntas en un desafío. Este constó de llevar adelante la convocatoria presencial del programa Experiencia Ambientalia, durante la semana del 8 de Abril. Las voluntarias del programa educativo, recorrieron 1848 km, para llegar a las 19 localidades de la región de Ansenuza que participan del programa.
Desde la costa este hasta la oeste, pasando por la costa sur, cada parada fue una oportunidad para conectarse con la comunidad. Visitaron un total de 23 colegios y 118 cursos. Marina y Marilena se sumergieron en conversaciones profundas con ex participantes y nuevxs interesadxs. Además, tuvieron la oportunidad de dialogar con autoridades locales, compartiendo la visión y el impacto de la fundación en la región.
Dentro de esta emocionante travesía, también participaron como expositoras en una reunión del Ente Ansenuza, donde representantes de todos los municipios escucharon atentamente y reconocieron el valioso trabajo realizado por la fundación.
El impresionante número de 33 bandadas seleccionadas para participar en el programa, con 270 jóvenes de 17 localidades diferentes, destaca el impacto y el interés que la difusión presencial logró reunir. Este resultado no solo demuestra el compromiso y la dedicación de la juventud hacia la conservación del medio ambiente, sino también su capacidad para unirse en pro de una causa común.
Con esta participación activa, se construye un futuro más prometedor para Ansenuza y sus habitantes, donde la colaboración y el liderazgo juvenil son fundamentales para la preservación de la región.
Celebramos su viaje y su impacto, y nos comprometemos a seguir trabajando juntxs para construir un futuro más sostenible y consciente.
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